Con una participación entusiasta de más de 90 personas, el Sistema Institucional de Educación a Distancia (SIED) de la Universidad Adventista del Plata (UAP) desarrolló recientemente un curso de extensión respondiendo a la solicitud del pastor Adolfo Gigliotti y de los líderes locales de iglesias y congregaciones de Empalme Graneros, Fisherton Norte, Funes, Pérez y el Instituto Adventista Rosario (IAR).

El curso abordó la didáctica para la enseñanza de las verdades de la Biblia, una propuesta basada en un libro de texto que guía el estudio en grupo y favorece el aprendizaje colectivo y reflexivo. «El curso que nos pidieron, declaró el Mag. Carlos Sapia, secretario de extensión del SIED, fue pensado para que los participantes puedan estudiar y aplicar principios bíblicos con una metodología efectiva. Se reúnen presencialmente, estudian, resuelven los contenidos en equipo, y tras un periodo de unos dos meses, reciben su certificado de extensión universitaria».

Durante la primera jornada, la energía en el aula era palpable. Con Biblias, libros y cuadernos en mano, los participantes, entre ellos exalumnos de la UAP y padres de actuales estudiantes, se reunieron con el firme propósito de aprender juntos. La jornada culminó con una foto grupal que inmortalizó este nuevo paso en la misión educativa de la universidad.

Este curso es parte de una red de acciones que el SIED viene desarrollando en distintos puntos del país y de la región. El modelo no solo responde a las necesidades de formación espiritual y académica de las iglesias, sino que también fortalece el vínculo entre la universidad y las comunidades locales, brindando oportunidades a quienes no siempre pueden acceder a la educación formal.

«El anhelo de aprender se percibía con claridad en cada rostro», concluyó el Mag. Sapia. «Eso es lo que más nos motiva: saber que lo que hacemos impacta en la vida de las personas, que se sienten valoradas y parte de esta familia educativa».

La UAP reafirma así su compromiso con la educación, la misión y la extensión, acercando contenidos relevantes, materiales de calidad y propuestas de formación accesibles a cada rincón donde haya una iglesia, una familia, o un corazón dispuesto a aprender.