El sábado 16 de marzo, se realizó un programa internacional cuyo objetivo fue celebrar el Día Mundial del Joven Adventista (o GYC por su nombre en inglés). Durante esta fecha cada joven adventista de todo el mundo se unió con sus pares para realizar acciones de ayuda al prójimo.

La Universidad Adventista del Plata adhirió a este plan de la Iglesia adventista mundial llevando adelante la actividad «Adopta» (lema de este año para este festejo). Más de cien alumnos de la institución y miembros de la comunidad de Libertador San Martín se llegaron hasta los hogares de la localidad para compartir un momento de camaradería y fundar una amistad, donde el principal pretexto fue: orar uno por el otro. Finalizada esta actividad, el grupo se dirigió al Anfiteatro Municipal para culminar la jornada con un programa de adoración y alabanza.

UAP Noticias entrevistó al Lic. Lucas Muñoz, líder de los capellanes de la Universidad, con el fin de poder comprender en qué consistía la actividad, y la perspectiva que tiene en cuanto a la participación de las personas involucradas en este programa: «La idea es que los alumnos se identifiquen con la misión hacia las personas y que entiendan que somos “Gente que cuida gente”, lema que hace alusión al rol preponderante que tiene el discipulado en el camino de servicio que tiene la iglesia. De esta forma, cada joven debe comprender que es un eslabón importante en la contención del otro».

En relación con los planes que tiene la Universidad para que esta propuesta se mantenga en el tiempo, el Lic. Muñoz, expresa: «La idea es continuar trabajando, en base al lema “Adopta”, en todas las facultades de la UAP, y en cada ámbito del desempeño estudiantil, compartiendo con compañeros o en los distintos grupos de servicio, creando así vínculos con las personas, sus compañeros de oración. Fue una bendición contar con tantas personas que, con una sonrisa y buena voluntad, realizaron la obra que Dios nos dio a cada uno: compartir su Palabra a través de nuestro testimonio».

Finalizando, el capellán de la Universidad consignó: «La vida del joven adventista es linda, es una vida de acción, con mucha motivación para ayudar y continuar a pesar de los desafíos que se le presenten. La Iglesia Adventista, la Universidad, y el mundo entero los necesita, ya que es hora de avanzar y proclamar el mensaje final para que podamos ver pronto a Jesús, regresando a buscarnos.”