En el marco del programa I Will Go UP, actividad coordinada por la Universidad Adventista del Plata (UAP), el sábado 21 de noviembre, se realizó esta ceremonia que premió el desempeño de 571 graduados.

El 21 de noviembre, se concretó este momento especial que cerró una etapa de esta iniciativa que contempla el entrenamiento, capacitación y una manera de estimular a quien desee sumarse al llamado del servicio voluntario.

Tres estudiantes de la Universidad tuvieron a cargo la conducción de este programa que se difundió a través de las redes sociales y los canales oficiales de la Universidad, y en tres idiomas: inglés, portugués y español.

En el inicio, el Dr. Jonathan Contero, director asociado de Mente Secular de la Asociación General (AG) de la IASD, el Prof. Yure Gramacho, coordinador del Instituto de Misiones y Crecimiento de Iglesias del SALT – FADBA, la Dra. Cheryl Doos, directora del Instituto Mundial de Misiones de la AG y el Dr. Petras Bahadur, director del Centro Mundial de Misión para las relaciones entre adventistas y musulmanes de la AG, entre otros capacitadores que fueron parte de esta Escuela, compartieron sus saludos y felicitaciones al grupo de jóvenes que finalizó esta capacitación.

A continuación, diferentes líderes del mundo presentaron proyectos de servicio que están en marcha en distintos lugares del planeta y que necesitan de los dones de muchos de los jóvenes que se prepararon para ser luz y sal de las naciones. Esta parte del programa contó con la participación, además, del Pr. Joni Oliveira, director del Servicio Voluntario Adventista de la División Sudamericana de la IASD.

Se presentó también el plan de Escuela de Misión para estudiantes del nivel primario y medio que se lanzará en 2021.

El dúo ConPaz Compuesto compartió su testimonio y en cómo su ministerio pudo ayudar a muchas personas, incluidas aquellas que estaban privadas de su libertad.

Este programa contó con la participación del Pr. Gary Blanchard, líder mundial de los jóvenes adventistas, quien motivó a los jóvenes a atender el llamado de Dios para cumplir su cometido de amor en todo el mundo, lugar que está pasando por un momento oscuro, de enfermedad y que requiere de personas que muestren la luz de Jesús a todos.

Los graduados de Escuela de Misión recibieron certificaciones del Servicio Voluntario Adventista, de la UAP, y del Instituto de Misión de la Universidad Andrews.

«Hace ciento veintitrés años que la Universidad mostró claras señales genéticas de una personalidad volcada a la misión –afirmó el Mag. Horacio Rizzo, rector de la UAP–.  Y esta fue la impronta de aquellos pioneros fundadores de esta institución. Generación tras generación fue desafiada a conservar este legado, caminar por esta senda. En febrero de 1918, un grupo de docentes se reunieron durante doce días para capacitarse para servir mejor y, desde ese momento se conjugaron la formación y el servicio mutuo. Este fuego continuó, actualizado a nuestros tiempos y necesidades, ante los desafíos que presentan estos tiempos. Agradezco a Dios, a cada equipo de la UAP, a las universidades del mundo que se sumaron y al liderazgo de la Dra. Lisa Beardsley-Hardy, directora del Departamento de Educación en la AG, que permitieron que este programa se llevara a cabo. Pero viene un 2021 con un UP Echange renovado y una Escuela de Misión con más propuestas y nuevos desafíos».