abril 2019
Una noche emotiva para la cohorte 2019 de Medicina
La Facultad de Ciencias de la Salud (FCS) de la Universidad Adventista del Plata (UAP) realizó, el domingo 14 de abril, en el Salón de los Pioneros, la tradicional Ceremonia de los Guardapolvos Blancos.
Los estudiantes del primer año de Medicina fueron investidos de sus guardapolvos blancos, acto simbólico donde familiares y amigos de estos jóvenes tuvieron una participación activa.
Durante el acto, se contó con la presencia del Mg. Gabriel Pérez Schulz, vicerrector Académico de la UAP; el Dr. Milton Mesa, decano de la Facultad de Ciencias de Salud; y en representación de la carrera de Medicina el Dr. Daniel Heissenberg, director de esta, quien estuvo secundado por su equipo de gestión.
Uno de los momentos emotivos de la noche, fue durante el reconocimiento a la trayectoria, la dedicación y al cariño puesto en la formación de cientos de estudiantes, dirigido al Dr. Ángel Miranda, la Dra. Ma. Cristina Schaab y la Dra. Graciela Posse. Cada uno de estos docentes de la carrera recibió una placa conmemorativa; además, estos referentes compartieron algunas palabras sobre lo significativo que es la experiencia en el aula.
La reflexión estuvo a cargo del Dr. Milton Mesa, quien motivó a los estudiantes a que utilizaran su profesión para el servicio a Dios: «El largo proceso de preparación que tendrán, las arduas prácticas profesionales y el énfasis que darán sus docentes a aspirar siempre a lo mejor, serán únicamente disparadores para que ustedes, como futuros profesionales de la salud, puedan dar su máximo esfuerzo para que las personas que vengan en busca de ayuda para sanar sus dolencias, puedan salir renovadas. Es su responsabilidad mostrar a Cristo en cada consulta, en cada cirugía, en cada visita y, así, ofrecer la posibilidad para que otros también lo conozcan».
Sulamita Galvão, alumna oriunda de Brasil y parte de la cohorte 2019 de la carrera de Medicina, habló con UAP Noticias, y expresó su sentir ante tan emotiva ceremonia. «Fue un momento muy especial, mi corazón estaba rebosante de felicidad. Estar allí significaba que todo esfuerzo, sacrificio, trabajo, nostalgia y oración valió la pena. En lo único que pude pensar toda la noche: lo bendecida que soy al tener un Dios tan grande que me permitió llegar hasta aquí. Mi sueño siempre fue ser médica misionera. Conocía la UAP y los proyectos misioneros que forman parte de esta. Me imaginaba lo lindo que sería estudiar en una universidad que cuenta con las mismas convicciones y principios que aprendí a lo largo de mi vida. Sin embargo, no tenía recursos financieros para venir a estudiar aquí, pero tenía la certeza de que Dios obraría un milagro y que, de alguna manera, permitiría que yo estudiase en esta Universidad. Y así lo hizo, cuando estaba a punto de decidirme por otra universidad internacional, mi Dios de amor envió a una persona para ayudarme financieramente y decidirme que mi lugar estaba en la UAP».
Lucas Giménez, alumno también de la cohorte 2019, contó a UAP Noticias su impresión acerca de la Ceremonia de Guardapolvos Blancos: «Desde que conocí el significado de la ceremonia, hasta que llamaron mi nombre para la colocación del guardapolvo, sentía que todo era un sueño. Luché mucho para poder concretar mi plan de estudiar en la UAP; es un lugar lleno de personas que, de una u otra manera, son especiales en mi vida y donde siento que pertenezco. Estoy muy agradecido a todas las personas que hicieron posible que este sueño sea una realidad, pero de manera muy especial, doy gracias a Dios por sus bendiciones y por la manera tan clara en la que me mostró que, Medicina y la Universidad Adventista del Plata, eran la elección correcta».
El Dr. Daniel Yañez, vicedirector de la carrera de Medicina en la UAP, destacó: «Esta ceremonia, no es más que un símbolo. Un mensaje a todos los alumnos, cuyo objetivo es reforzar su vocación, teniendo como base “amar al prójimo como a uno mismo” (Mat. 22:39)».