Entre el 23 y el 25 de octubre, una comisión de la Asociación de Acreditación Adventista (AAA), liderada por el Dr. Julián Melgosa, director asociado del Departamento de Educación de la Asociación General (AG) de la Iglesia Adventista del Séptimo Día (IASD), y por el Dr. Sócrates Quispe Condori, director asociado de Educación de la División Sudamericana (DSA) de la IASD, desarrolla actividades en la Universidad Adventista del Plata (UAP). Además, conforman este grupo el Cr. Gerardo Tomasini, tesorero asociado de la DSA; el Dr. Mauricio Comte, rector de la Universidad Adventista de Chile; el Dr. Juan Choque, rector de la Universidad Adventista de Paraguay; el Dr. Fabiano Silva, vicerrector Académico de la Facultada Adventista de Bahía; y el Prof. Eduardo Valentini, director de Educación para la Asociación Argentina Central de la IASD.

El objeto de la visita del grupo de la AAA, es llevar adelante la evaluación regular de la Institución. Este organismo de acreditación establecido por la iglesia adventista tiene como función coordinar, supervisar y controlar la calidad de su sistema educativo. Es responsable de evaluar la implementación de la filosofía de la educación adventista con el propósito de fomentar la unidad y la misión de la IASD.

También, dialogamos con el Dr. Melgosa sobre el desarrollo de este survey, a lo cual puntualizó: «La comisión tiene unas serie de criterios bien establecidos, es decir intenta no ser subjetiva. Más que expectativas, tenemos una adherencia al protocolo de evaluación, en el cual confiamos. Aún más, en una visita regular que se realiza cada cinco años, el proceso debe ser de calidad, con seriedad, examinando cada punto y sobre cómo se abordaron las recomendaciones que se puntualizaron en el último survey realizado. También, este proceso tiene una mirada al futuro, analizando si la institución cumple con los estándares establecidos por la acreditación».

Cuando consultamos al presidente de la comisión de la AAA sobre cómo afectan los cambios que se producen a nivel social, político y económico, al momento de administrar la educación superior, en este caso, en una entidad adventista, explicó: «Siempre existirán contextos sociopolíticos y geográficos que van afectar el servicio que damos a nuestros estudiantes. En algunos lugares son más acentuados que en otros, pero siempre viviremos con esos desafíos. Debo decir que, en otros lugares del mundo pasan por momentos muchos más difíciles de los que pueden estar pasando en este país. El Señor interviene, de manera insospechada y realmente milagrosa, abriendo puertas. Quiero animar al equipo y comunidad de la UAP a que pongan su confianza en Dios. No es un tópico, es una realidad que comprobamos como líderes de la iglesia mundial, constantemente. Él está y seguirá utilizando a la educación, hasta el final de los tiempos, como una herramienta de formación y fortaleza para la iglesia; de evangelización, hacia afuera de ella. No podemos dejar de confiar en el Señor».

La Universidad Adventista del Plata cumplió en septiembre 120 años de trayectoria educativa. Acerca de esto, consultamos al Dr. Melgosa cómo ve este proceso histórico en la identidad actual de la institución, a lo que respondió: «El informe que presentaremos el jueves en la tarde va a incluir un número importante de felicitaciones. Va a haber tantas como recomendaciones, en este último sentido, porque entendemos que siempre hay maneras de mejorar la situación. Pero hemos visto un crecimiento, en número y en calidad, un desarrollo en la misión que tiene la universidad en términos de servicio para con la IASD, cuestión fundacional de esta Institución. Nos encontramos con un ambiente familiar y de camaradería, en términos generales, entre docentes y no docentes, estudiantes y la administración. Creo, en concordancia con los miembros de esta comisión, que la UAP está en una muy buena condición; y continuamos creyendo, amando y apoyando a esta Casa, oramos por ella, pues esta es una de las instituciones más ejemplares del mundo adventista».

Además, desde UAP Noticias pudimos recoger expresiones del Dr. Quispe Condori, quien compartió su visión acerca de este proceso de survey: «Consideramos que esta evaluación ha sido altamente positiva, pues conseguimos aspectos (gracias al trabajo colaborativo de esta institución) que favorecerán al crecimiento de esta universidad, generado por el esfuerzo y complementación de cada una de las partes».

Consultado acerca de un nuevo aniversario de la institución y su valor en el contexto de la misión de la IASD en esta parte del mundo, el director asociado de Educación de la DSA, consignó: «Ciento veinte años de trayectoria es mucha historia. Pero Dios estuvo en cada detalle de esta institución. Llegar a este punto es ver cómo Dios cuidó al liderazgo que administró este lugar. Cuidó de las estrategias asumidas en cada momento y, aun en los momentos difíciles,; bíblicamente se afirma que el Señor prodigó para que todas las cosas sean para bien, para aquellos que aman a Dios. Hoy él permite que esta universidad tenga esta visibilidad, presencia y reconocimiento como una institución que apela al servicio. Cuando uno ingresa a este campus respira este aire a misión, y esto trascendió hasta las más altas esferas de la iglesia, como por ejemplo, I Will Go, un proyecto surgido en este lugar que fue sumado al plan estratégico de la iglesia mundial. El impacto que tiene la UAP es muy relevante. Cuando uno sale de esta Casa lo hace motivado y desafiado, oramos por la misión de la universidad».