El viernes 12 de abril, los alumnos ingresantes de la carrera de Medicina de la Universidad Adventista del Plata experimentaron una tarde diferente. Alumnos avanzados y docentes de la carrera idearon un programa que integrara al estudiante del primer año a la dinámica propia de la formación y, además, se pudieran generar relaciones firmes que los acompañarán en los siete años de cursado.

A las 15:00, en el Campo Deportivo de la Universidad, se reunió a la nueva cohorte, junto a los alumnos de segundo, lugar donde desarrollaron diferentes actividades recreativas organizadas por el último grupo.

UAP Noticias entrevistó a Ianco De Lima, alumno de 2° año de Medicina y uno de los organizadores del evento, quien pudo compartir algunas experiencias que se generaron a partir de generar estas actividades: «Me alegró mucho saber que íbamos a seguir con esta tradición que comenzó con nosotros el año pasado. Es una experiencia enriquecedora, ya que compartimos momentos de camaradería junto con otras personas a las cuales no conocíamos y con quienes podemos cooperar mutuamente en nuestro desarrollo profesional. Los juegos fueron organizados por los chicos del segundo año de Medicina, en la que cada joven estuvo involucrado de alguna manera u otra».

Finalizadas las actividades recreativas, los ingresantes tuvieron un momento libre; luego, continuó el programa de la fogata, que tuvo como principal motivo la unión y camaradería del grupo, culminando este momento con una cena en conjunto. La meditación estuvo a cargo del Preceptor Juan Carlos Játiva, quien tuvo palabras de aliento para los futuros profesionales. «Deben tener en claro que, para curar el cuerpo, deben tener a Cristo como su médico personal, entonces así podrán ser ustedes instrumentos de sanación física y espiritual de aquellas personas que vayan en busca de su ayuda», afirmó el encargado del mensaje.

El Dr. Daniel Yañez, vicedirector de la carrera de Medicina de la UAP, conversó con UAP Noticias acerca de esta actividad: «Algo que destaco de este día especial, es la frase que los alumnos de 2^o año regalaron a los ingresantes como consejo “Es fácil comprender el espíritu de la Medicina: estudiar a fondo un mundo grande y pequeño, entendiendo que lo primero y lo último, es voluntad de Dios”. ¡Qué bueno dejar a Dios como centro de nuestras vidas! Y esto, a pesar de la cantidad de material que tengamos que estudiar, o de lo mucho que nos cueste tomar algunas decisiones. Si Cristo, el dador de vida, es la base de todo, no hay por qué preocuparse».

La Universidad Adventista del Plata fomenta el liderazgo de sus estudiantes, apoyando activamente la realización de actividades de camaradería y espirituales que organicen los jóvenes.