Del 28 de agosto al 7 de septiembre, el Coro de Campanas y la Banda Sinfónica de la Universidad Adventista del Plata (UAP) realizaron una gira que dejó huellas imborrables tanto en los integrantes como en las comunidades visitadas.

La travesía incluyó presentaciones en Bahía Blanca, Balcarce, Necochea, Miramar, La Plata y diversos colegios e iglesias de Buenos Aires, así como actuaciones en teatros y espacios públicos.

En esta oportunidad, el Coro de Campanas, bajo la dirección de la profesora Cinthya Samojluk y la Banda Sinfónica de la UAP, dirigida por el profesor Gonzalo Aquino, fusionaron sus instrumentos para ofrecer una experiencia musical novedosa y cautivante.

La propuesta artística combinó obras seculares, como La Pantera Rosa o A Million Dreams, con un repertorio sacro que permitió transmitir un mensaje de adoración y esperanza. Esta diversidad permitió llegar a públicos variados: desde auditorios repletos en teatros y shoppings hasta congregaciones e instituciones educativas.

Más allá de lo musical, la experiencia estuvo marcada por la convivencia y el crecimiento personal de los jóvenes. «Lo más destacado es ver cómo los estudiantes dedican su tiempo, talentos y recursos para servir a otros, y al final ellos mismos resultan los primeros bendecidos», expresó la Prof. Samojluk.

Las anécdotas también formaron parte del recorrido. Una de las más recordadas fue la llegada a la playa de Bahía Blanca bajo una intensa lluvia, que terminó con todo el grupo empapado pero unido en la risa y la complicidad; momentos como este fortalecieron los lazos entre los integrantes.

El público respondió con entusiasmo y sorpresa, especialmente al descubrir un ensamble tan particular como el Coro de Campanas, único en el país. Desde exbailarinas que se emocionaron con piezas clásicas hasta vecinos que se acercaron por curiosidad, la música abrió puertas para el encuentro y el diálogo.

En palabras de su directora, la gira puede resumirse en una frase que se transformó en epígrafe: «Amistad, música y servicio, unidos para glorificar a Dios en todo lo que hacemos».